Desde que se obtuvieron las primeras células madre embrionarias en laboratorio en 1998, científicos de todo el mundo han intentado utilizarlas para regenerar órganos y tejidos enfermos.
Estudios con células madre
Córnea
El Instituto de Investigación Biomédica del Hospital La Paz de Madrid (IdiPAZ) fabricará un sustituto completo de córnea, creado a partir de materiales biológicos y células madre del propio paciente.
Están explorando distintos métodos para “sintetizar una matriz extracelular polimérica de colágeno que imita la córnea humana”. Sobre esa matriz se imprimirán en 3D células madre del paciente, por medio de la nanotecnología, produciendo así córneas biológicas a medida para “dar respuesta a las personas que necesitan trasplante de córnea y devolverles la visión”.
El objetivo es fabricar las primeras córneas para uso clínico en cinco años y producirlas después “en el plazo de una semana”, manifestó la Dra. María Paz de Miguel, que dirige el equipo.
Retina
Proteína Wnt
La retina es una parte del cuerpo humano esencial para nuestra vida, sin embargo, carece de la capacidad regenerativa que sí tienen otras partes de nuestro organismo como la piel.
Esta incapacidad de regeneración celular ocasiona que lesiones o enfermedades oculares que dañan las células pigmentarias provoquen una pérdida de visión permanente.
En 2014 las Doctoras Pia Cosma y Daniela Sanges del Centre de Regulació Genòmica / Icrea de Barcelona, obtuvieron resultados en ratones adultos con células madre provenientes de la médula ósea.
Sus investigaciones utilizaban células madre y una secuencia de reacciones basadas en las proteínas Wnt , claves para regenerar las patas de los anfibios o los ojos de los peces cuando sufren heridas.
Pez cebra y el neurotransmisor GABA.
Recientes investigaciones llevadas a cabo por un equipo de biólogos en la Universidad de Vanderbilt, en Nashville, Tennessee, Estados Unidos, pretenden regenerar las células sin llegar a estar lesionadas previamente.
La capacidad de regeneración ocular de estos peces teleósteos se ha analizado desde hace años gracias a otros estudios, sin embargo, aún no se conocían bien algunos de los mecanismos fisiológicos que actúan en el proceso.
El GABA es un inhibidor de la actividad cerebral y su función, explicada de manera sencilla, se podría decir que es el responsable de mantener tranquilo nuestro cerebro, inhibiendo o eliminando una buena parte de las señales procedentes de nuestras terminaciones nerviosas.
Las investigaciones surgieron a raíz de un artículo publicado en el que se demostraba que este neurotransmisor era el responsable de la regeneración del páncreas. ¿Podría regenerar también la retina?
El fin de estas investigaciones es encontrar un tratamiento útil para enfermedades que producen ceguera por degeneración de la retina como retinosis pigmentaria, retinopatía diabética o glaucoma.